Acerca de la contaminación lumínica.

¿Por qué es importante esta problemática? Porque el cielo es un patrimonio cultural de todos. Mucha gente no sabe lo que es un cielo estrellado, limpio y nítido, sólo lo ha visto en películas o fotos. Desde la antigüedad, las estrellas han guiado a los viajeros, nos han enseñado la medida del tiempo y contado la historia de civilizaciones que existieron cientos de años atrás.
¿Por qué debería interesarle a alguien que no es astrónomo o aficionado? No sólo estamos perdiendo un bien cultural que nos corresponde, ni el derecho a la curiosidad, al acercamiento a una de las ciencias madres más importantes. También estamos perdiendo recursos económicos: toda la luz que dirigimos hacia el cielo, es luz desechada, derrochada. Esta energía que desaprovechamos podríamos ahorrarla para otras cosas, y además dejaríamos de contribuir tanto al agravamiento del calentamiento global.
¿Es imposible erradicar la contaminación lumínica? No. Nadie está hablando de apagar todas las luces de la vía pública (justamente, el que está sufriendo un “apagón” es nuestro cielo). Cada luz tiene su utilidad, pero el problema es que la mayoría de las luminarias están mal diseñadas y como anteriormente mencionado, desperdician energía y luz hacia la atmósfera. Entonces, entre todos: vecinos, gobierno y medios, deberíamos poder hacer de la iluminación algo eficiente y no problemático. Dirigiendo bien las luces hacia donde efectivamente se quiere iluminar, apagando las publicidades a las tres de la mañana cuando nadie las ve, siendo razonables con el uso de la luz.
(Todas estas preguntas son respondidas en profundidad en el documental)

Agradecimientos
Este proyecto no hubiera sido posible sin la colaboración de los entrevistados, quienes brindaron su conocimiento, tiempo e imagen. Gracias a Beatriz García, Eduardo Fernández Lajús, Marcelo Abelenda, Mariano Ribas, y Roberto Venero.
Gracias a Redecit: Angel Rodríguez y Paula Parapugna, encargados de cámara e iluminación, por su excelente trabajo y buena onda.
Espaciales agradecimientos a una persona increíblemente comprometida con la causa, Viviana Bianchi, por su total apoyo en el proyecto, brindando información, alentando, y haciendo posible la filmación en el Observatorio de La Plata (establecimiento al cual también le agradezco el haber prestado sus instalaciones); y a Ricardo Contreras, de Espacio Profundo, por ceder amablemente su espacio para las entrevistas y colaborar con material fotográfico.
Gracias a Radio Kosmos, y a los usuarios del foro Espacio Profundo.
A las familias Gatto, Tineo, y Mendez Velazquez. A Macarena Alonso, Graciela y Sebastián (quienes participaron en la filmación en exteriores).
A toda las personas que colaboraron directa o indirectamente con el proyecto, ¡muchas gracias!